Tengo tanto que contar de esta historia, de cuando amo los pequeños detalles , Gavin cantando y dando vueltas con su rostro pintado, buscando cerditos para jugar, preocupándose del pequeño gatito, pero demostrando lo peligroso que es en uno momento, no hizo daño pero hizo estremecer a Connor. Quizás me hubiera gustado interiorizar en la vida de Hank, pero era difícil ya que hubiera sido muy obvio el final y aquello me causa gracia, Hank en otras historias (mías tambien) actúa como un adolescente enamorado, pero es un hombre mayor, igual de testarudo que Gavin y por primera vez lo hice actuar como creo que actuaría un hombre como él.
Hay tanto más por decir, pero prefiero ocupar mis ideas en otras historias , quizás lo que quería que sucediera sea el inicio de algún cuento... lo pensaré.
Otra cosa!!! Hay una escena en particular que me apasiona! Pero pareció pasar desapercibida por el resto. En toda la historia Gavin jamás mira atrás para despedirse, nunca lo hace y sabemos que no lo hará, cuando sale de la casa de Nines al final hay una esperanza de que se detenga en el umbral de la puerta y voltee para dar un "último adios" por no lo hace, él solo avanza y escapa sin mirar atrás, algo que destruye a Nines ya que esperaba que volteara, lo añora toda la historia y creímos que Gavin cumpliría ese capricho, pero no es así. Por alguna razón creí que me odiarían en esa escena, que odiarían a Gavin y me esperaba algunos mensajes para él, pero la escena pasó sin pena ni gloria a pesar de la carga emocional que tenía.
En fin, amo mi propia historia y algunas veces soy tentada a leerla y comentarla como si yo no la hubiera escrito.