Satoru caminaba con pasos relajados por los pasillos del colegio Jujutsu, con las manos en los bolsillos de su chaqueta blanca. Su aura despreocupada contrastaba con la tensión en el ambiente, mientras los estudiantes que se cruzaban con él lo miraban con respeto.
—¡Yuta! ¡Cuánto tiempo! —dijo, su voz resonando despreocupada—. Sabía que si venía por aquí, te encontraría haciendo lo tuyo, reflexionando en silencio o entrenando hasta que el sol se ponga. No has cambiado nada, ¿eh?
//¡Muchas gracias por seguirme! Espero que nos llevemos bien y que mis historias sean de tu agrado ♡♡