▪︎☆▪︎Su aliento, robado por la mezcla de sentimientos tan abrumadora, la dejó completamente muda por unos largos minutos. Movía y cerraba su boca cómo un pececillo, aparentemente tratando de encontrar las palabras adecuadas para decir, pero a pesar de todos sus esfuerzos, terminó por simplemente tomar las prendas y sostenerlas contra su pecho. —Mar, ésto es... — Pausa, insegura de lo que puede estar a punto de decir, mira hacia su mejor amiga con una sonrisa triste. —Es precioso, Mar, es solo que realmente quiero verme linda para ese día, y el último Halloween... — vuelve a enmudecer, esta vez realmente mostrándose triste aunque sus ojos estuvieran apartados ahora.