Oh mi dulce nena,
Sigue siendo la misma pena,
La que mi alma enajena.
Somos tu y yo, como todo dúo,
Pero no entiendo como el residuo,
De lo que era tu llama, se apaciguó,
Como un pedazo de tela sin futuro.
Ya no hay nada más que dar,
Hay para dar alas al amar
Sin nada que alabar al hablar,
Solo hay una sala de besar.
Por eso ya no tengo nada de tus besos,
De esos que para mis sesos son deseos,
Siendo solo lo que tu futuro sostenía,
Por eso no te alejabas ni un día.
Creo que mi mente es la que estrese lo suficientemente,
Por eso ya no miente, ya no comprende eficientemente,
Hace rato me casé de todo individuo a mi lado,
Que me daba la mano con mil engaños, un malparido.
Con la vida completa para hacer free,
Incluso si aquí ya nadie es free,
Y eso que dar la libertad es free
Por eso al final del día se que alguien will set me free.