Elizabeth BC

Por favor no niegues que el fuego se extinguió, que se apagó el amor que me tienes, o me solías fingir, no tienes que mentir, lo puedo yo sentir.

No recuerdo como suena tu voz cuándo dices mi nombre.
          Desperté a media noche, estaba soñando contigo y me di cuenta que empiezo a olvidar tu voz.
          Recuerdo tus expresiones favoritas, la forma en la que dices no, frunciendo el ceño y hablando como niño chiquito enojado.
          Recuerdo las historias que solias contarme al salir de tu escuela y recuerdo aún más esas que me contabas de cuando eras pequeño, tu forma distintiva de pronunciar la i griega como si se escribiera con ese y hache "sha", tu acento camaleonico que adoptaba el de la persona con la que estuvieras hablando y que normalmente parecía una mezcla entre el norte de México y alguna otra parte de Ecuador, tu forma de camuflajear la decepción con lentitud al hablar y el enojo con silencio y tu manera de maldecir más de 8 veces por cada oración.
          Recuerdo muchas conversaciones y detalles de tu voz, pero por más que intento no recuerdo mi nombre saliendo de tus labios.
          Mi nombre no es igual sin tu voz. No aguante más y te hablé...
          Gracias por no contestar.

Últimamente han pasado tantas cosas, tantas decepciones, tantas sorpresas, tantas malas palabras, tantas cartas sin leer, tantos libros sin terminar, tantos anónimos sin saber, tantos días de soledad, tantos mensajes sin enviar, tantas discusiones con las que tienes que lidiar, tantas... Estupideces. Llega un momento en el que ya nada te importa. Tus "amigos" esas amistades que tienes solo por un ratito, terminan enseñándote tantas cosas, terminan siendo una persona más, terminan siendo un simple recuerdo. Te lastiman y no valoran tu amistad. Gracias a esto, he aprendido que las personas son muy diferentes a lo que aparentan. No a todos los decepcionan como a mí me decepcionaron. Si tienes una persona que te escucha, te da consejos, te enseña cosas positivas y siempre te ayuda a decidir que es lo mejor para ti. Se llama amigo. No importa dónde esté, no importa si está lejos de ti, siempre estará para ti, hay veces en las que solo quizá... Debes entender que los amigos no siempre son los que ves a diario.

Realmente no puedo idealizar a alguien enamorado de mí. No me puedo imaginar a alguien pensando en mí antes de acostarse, o hablándole a sus amigos acerca de mí con una sonrisa tonta. No puedo imaginar a nadie por las nubes solo porque le dije "hola" o algo similar. No me puedo imaginar a alguien sonriendo a la pantalla del ordenador cuando está hablando conmigo.

No iré a decirte que te quiero, mucho menos cuando sé que estás con alguien más, no te lo diré simplemente porque no mereces que cause algo cuando tú ya estás bien...

Te odio, ojalá te resbales por las escaleras de tu casa y caigas bien feo rodando hasta mis brazos, te extraño.

Ver a dos novios besándose y tú ahí, desenredando los audífonos.

"Me encantaba verle reirse con ganas. Tenia dos clases de risa: una era la tipica risita tonta y la otra una risa a carcajadas, con la cabeza echada hacia atras. Si tuviera un solo objetivo en la vida, seria hacerlo reir a diario."

Perdón. No quise hacerte sentir enamorado. Veras, a mi no llama la atención eso de los corazones completados y las mariposas que giran en la panza, soy más real, soy más humana. No buscaba hacerte sentir enamorado, verdaderamente espero no estes enamorado de mi porque suelo romper todo lo que se me acerca, soy una cosa muy tóxicas, no creas que la sonrisa y voz de dulce son reales, no, por dentro soy otra cosa, muy distinta mi amor. No se enamoré de los venenos, habemos algunos letales.

Pero a pesar de todo... A ti seguiría salvándote siempre. Llámame tonta, pero un día hice tuyo mi dolor y eso me pesa más que sacarte a ti del subsuelo.
          Y no vamos a mentirnos... Siempre nos ha gustado seguir hurgando entre las costillas del otro, atravesar mil y un laberintos, adueñarnos del corazón de ambos, unirlos y hacer uno solo.