La Maldición Del Blacklands Home.
En la mansión que el tiempo olvidó,
donde el susurro de sombras se escondió,
dos almas perdidas, en juego y en pena,
se enredan en sueños de luna llena.
Thomas, en su rincón, en silencio está,
sus ojos no miran, su mente se va,
mientras Eileen, de risa y sol llena,
baila en los pasillos, sin pena ni pena.
Emily, la niñera, con corazón firme,
en esta casa que el terror presume,
lucha con fantasmas, con la noche y el frío,
cargando el peso de un oscuro desvío.
Los murmullos del viento, los gritos de horror,
en cada rincón laten con un frío temor.
La casa susurra secretos de antaño,
y los fantasmas buscan a quien causen daño.
Pero en el laberinto de miedo y dolor,
un rayo de esperanza surge con fervor.
Thomas y Eileen, bajo el cielo estrellado,
encuentran en Emily un alma aliviado.
Y así en la noche, entre pesadillas y gritos,
la valentía y la luz desafían los mitos.
En Blacklands Home, donde el horror parece reinar,
el amor y la fe luchan por triunfar.