▪︎☆▪︎Isabella comenzó a chillar cómo un animal atormentado en cuánto era sacudida por la chica, ella estaba tan sumida en sus pensamientos que no la había notado llegar, lo que fue un susto enorme para ella.
—¿Qué? ¿Qué pasó?— jadea, sus mariposas alrededor de su cabeza revoloteaban cómo locas, abrumadas del súbito sismo que acababa de ocurrir en su hogar.