Un pequeño adelanto después de haberlos dejado esperando durante tanto tiempo:
La tenue luz de la luna llena entraba sutilmente e iluminaba su habitación que, a diferencia de ella, estaba más organizada e impoluta. Dando un vuelco sobre su colchón y apretando su almohada entre sus pechos, se acercaba peligrosamente al borde de la cama.
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Nejire bostezó de nuevo, frotándose los ojos con la mano libre. Estaba a punto de decirle a Yuyu que la dejara dormir en paz, pero entonces algo en su cerebro hizo clic.
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El fuerte retumbar de los relámpagos junto al fuerte sacudir del edificio sacó a Midoriya de su ensoñacion quien se apoyó contra el muro buscando poder descansar de los combates, no quería tener que lidiar con Iida ni mucho menos con Bakugo, no en este estado. No ahora, de hecho no quería pelear para este punto del combate. Con todo el escándalo ya sabía que le quedaba poco para idear un plan alterno al que ya había trazado.