El chico estaba angustiado, confundido y hostigado viendo como la madre de su hija estaba parada con una postura ignorante. Él Quería respuestas —¡esto ya no se trata de lo nuestro, se trata de que estés para poly!— dijo el chico reclamandole a la mujer que lo abandonó dejándole consigo a su recién nacida hija.
—bueno pues, ya estoy aquí ¿no? Entonces no estoy ausente, además, ¿poly? Que nombre más estúpido le pusiste.— respondió la chica ante la queja de su ex pareja. —es una combinación entre nuestros nombres. Si, pensé en ti aún cuando le puse su nombre y tu no estabas.— dijo. —a mira que bien, manchando mi imagen con una escuintla de quinta.— —¡no te refieras a ella de esa forma, es tu hija, maldita sea!— Defendió él. —no grites y no exageres, ya estoy perdiendo lo suficiente al hablar con un don nadie y su mocosa— —... mira, no te impediré que la veas, solo te pido que.. ella no tiene la edad para saber a lo que te dedicas. Si ya sabrá contar hasta cinco y ya sabrá conducir un camión monstruo con solo ocho meses de nacida pero de igual forma te pido que no le cuentes a lo que te dedicas.— —... ¿dijiste que sabe conducir camiones monstruo? ¿Pos' que salió de mis piernas hombre?— empezó a ponerle atención despues de las palabras desubicadas del chico. —si, digamos que una fusión entre mi ""raza"" y una mujer que salió de un laboratorio hizo que naciera una extraña combinación entre una niña y una caricatura de los 60's que se puede tragar una bomba atómica como si fuera un simple arroz pero le da indigestión si le das un taco de carnitas.. y no te entiende si le dices más de tres sílabas pero.. es lo que aprendí estando presente para ella.— la chica se quedo sin palabras.