Enamorados y felices, con la certeza de que el destino unió sus vidas por razones que ni ellos mismos comprenden, pero que disfrutarán el tiempo que les quedé juntos. Preparados para morir colgado de los labios del otro, dentro de un círculo dulce y amoroso del que ambos están felices de entrar, pero sólo lo harán si están juntos, sus almas, unidas por la divinidad del amor primerizo y sincero, recorrerán su camino, uno junto al otro, por la eternidad, y ni la muerte ni los problemas separarán su unión....