LE PEDI QUE HICIERA UN CAPITULO DE GUS Y LEON Y MIREN LO QUE HIZO LA IA (no pregunten por que Leon esta asi)
Leon, tras su pelea con Nita, se dirigió al parque buscando a Gus. Llevaba su carrito rojo, pero en lugar de dulces, una colección de figuritas de acción y un trompo. Encontró a Gus y a Buster en la banca. Leon se acercó, lanzando el trompo con un gesto arrogante.
Leon: ¡Eh! ¿Eres Gus? Mira mi trompo, es el mejor. Nadie puede superarme.
Buster: (Un poco incómodo) Hola. Sí, él es Gus. ¿Quieren jugar?
Leon ignoró a Buster, concentrándose en Gus.
Leon: (Mostrando sus figuritas) Estas son mis figuras de acción, todas son súper raras y valiosas. ¿Tienes algo así de genial? Apuesto a que no.
Gus, tímido, miró sus figuras con los ojos muy abiertos, pero no respondió. Leon continuó presumiendo.
Leon: Este carrito es increíble, lo mejor del parque. Te daré una vuelta, pero solo si prometes que no lo vas a rayar. Es muy especial, ¿sabes?
Leon, sin esperar una respuesta, empezó a girar el trompo con una destreza que, aunque impresionante, era un poco ostentoso. Gus observaba, cautivado por la habilidad de Leon, pero también un poco intimidado por su actitud.
Leon: (Deteniendo el trompo con un golpe preciso) ¿Ves? ¡Soy el mejor! Si quieres jugar conmigo, tienes que ser rápido y ágil, como yo. Los lentos no son bienvenidos.
Leon, sin esperar la respuesta de Gus, comenzó a armar una pista elaborada con palitos y piedras para su carrito. Gus lo observaba, indeciso. El comportamiento de Leon, aunque llamativo, era claramente egocéntrico y un poco intimidante para el tímido Gus. La invitación a jugar estaba presente, pero la actitud de Leon la convertía en un desafío más que en una propuesta amistosa.