Sé lo que quiero ser, y sé donde quiero estar, pero la realidad me despierta, del sueño en que muchas veces me envuelvo, lo que quiero y lo que debo ser, son cosas muy diferentes. Una vez este pensamiento cruzo por mi mente “Si mi vida hasta ahora ha sido un infierno, mi vida en adelante deberá ser de felicidad” pero este pensamiento surgió cuando era una niña que creía que el sufrimiento de las personas venia en una cantidad que todos debemos soportar, ya sea al principio o al final, o incluso en el transcurso de nuestra vida, ya ha pasado mucho desde ese día, y el dolor no se detiene, pero la esperanza aun no me ha abandonado, aun espero ese día en que todo cambie.