Me he divertido leyendo, he votado hasta donde he leído. Después continuo.
Es la primera vez que —desde que existe mi cuenta— he dejado un comentario o comentarios en tu caso. Siempre me he mantenido silencio, leyendo y riendo de la gracia de esos comentarios que dejaban. Pero no podía quedarme en el silencio, debía escribir algo.