El mundo real no me gusta, podría decirse que me es aterrador y lo es.

Quizás por eso me escondo entre las páginas virtuales de estos libros, pero no solo eso, no puedo evitar imaginarme mundos enteros, donde los personajes que me gustan conviven juntos, haciendo una historia de mi autoria, a veces retorcida, a veces divertidas pero todas tienen la misma finalidad, entretener a las personas que se toman el tiempo de leer relato tras relato.

Amo leer, pero escribir.

Escribir es como tener el poder de ser dios y yo manejo que sucederá, no hay incertidumbre para mi, puedo controlar lo que pasa en estas dimensiones hechas por mi. Prefiero mi pequeño mundo ficticio a la realidad.

Espero les gusten alguna de mis historias.

Besitos, abrazos y galletas de azúcar para todos los que me han apoyado durante cuatro años. ❤️