JossyBethS

—No va a pasar nada Mónica, además ya le eche el ojo a otro que de verdad me mueve el piso y me moja la vagina— la mirada pícara de Norma causa risitas en la pequeña reunión pues es inevitable dejar volar la imaginación. —Mejor dime como vas con el proyecto del zurrón, Laura me dijo qué has estado gritando toda la mañana.
          	
          	
          	

JossyBethS

—No va a pasar nada Mónica, además ya le eche el ojo a otro que de verdad me mueve el piso y me moja la vagina— la mirada pícara de Norma causa risitas en la pequeña reunión pues es inevitable dejar volar la imaginación. —Mejor dime como vas con el proyecto del zurrón, Laura me dijo qué has estado gritando toda la mañana.
          
          
          

JossyBethS

Otra por el simple placer, jajajaja 
          
          La calaca buscaba y buscaba,
          desde muy temprano por la mañana,
          en el parque al amanecer estaba,
          pero encontrarlo era toda una hazaña.
          
          Buscaba a Diego Badillo,
          futbolista de corazón,
          lo buscaba con mucho ahínco,
          para llevárselo al panteón.
          
          Lo encontro al fin un día,
          entre una aglomeración,
          muy feliz y motivado
          para correr un maratón.
          
          Enojada se acercó la huesuda,
          con cansancio y decisión,
          le dijo vente ahora mismo conmigo,
          que nos vamos al panteón.
          
          Diego la vio confundido,
          y con burla le contestó,
          si quieres que me vaya contigo,
          corre conmigo este maratón.
          
          La muerte se quedó muda,
          por tal invitacion,
          te veo el año que viene,
          y se fue con resignación.

JossyBethS

Nunca olvidemos nuestras tradiciones. Calaverita literaria de este año.
          
          Llegó la muerte un día
          preocupada y con desazón,
          buscaba desesperada
          quién le diera orientación.
          
          Problemas con el SAT tenía
          y regular su situación le urgía,
          pues ni en el más allá se podía
          librarse de tremenda agonía.
          
          Se topó con Alma Ruiz
          Contadora de profesión,
          la encontró con mucho trabajo
          y le contó su preocupación.
          
          Alma la escuchó atenta
          y de ella se compadeció,
          le dijo voy a ayudarte
          pero de pronto palideció.
          
          La flaca se preparaba
          para llevársela al camposanto,
          sacó su guadaña afilada
          y pronto la tomó del brazo.
          
          Alma se soltó asustada
          y rechazó su invitación,
          si quieres que te ayude
          no me lleves al panteon.
          
          Quedarme aquí no puedo
          en este mundo sin corazón,
          me llevó mis problemas
          de regreso al panteón.