"Soy como un libro. Una vez me abrí y me rompieron las páginas. Desde entonces no he dejado que nadie me abra."

Desde que nací he tenido un inmenso miedo a la traición. Construí una muralla hecha a base de desconfianza, frialdad, y antipatía. Una muralla que a primera vista parece impenetrable. Pero cuando te fijas bien, no puedes creer lo frágil que es en realidad.

Desde mi niñez he tenido que aceptar tantas verdades desgarradoras, que la realidad ya no me asusta. Sé perfectamente en que mundo vivo, y lo odio. Me odio a mí misma.

No sé que hago aquí. La gente me crítica en cada instante. Me amargo en cada momento. Vivo la sensación de soledad en cada milímetro de mi cuerpo. No tengo a nadie. Estoy sola.

Vivo en un mundo gobernado por la soledad y la desconfianza. Un mundo donde la cruda realidad ha causado estragos y ha sido inundado por una frialdad digna de un reino helado. Un mundo donde la esperanza no existe y el miedo vence. Ese mundo es mi realidad. 

¿Te atreves a entrar en mi realidad?