#aun me acuerdo del beso de fin de añO de estos dos, so, creo que podrás deducir de que me inspiro ah-
Desde la última noche que estuvo con el azabache, el albino estaba realmente confundido respecto a lo que sentía ¿Cómo no estarlo? Desde esa noche, fue un cambio bastante repentino para él y para el moreno. No estaba seguro de lo que estuvo, estará y esta pasando por la mente del otro antes, en el momento y después del 'regalo' de no solo año nuevo, mejor dicho, de cumpleaños.
El albino suspiro para calmarse, incluso si los nervios lo tenían algo ido. Observo unos instantes la caja que llevaba consigo con pequeño lazo rojo, al parecer, hecho por las manos del afortunado. Debido a que no fue a visitarle o incluso decirle por lo menos un 'hola' por medio de chat, estaba dudando de si era buena idea ¿Debería esperar un poco más? No quisiera que Kamukura pensara el hecho de tal vez estar evitándolo.
Al parecer el clima no estaba a su favor, no había vuelta atrás hacia casa. No mientras la lluvia torrencial siguiera aumentando, al estar esperando fuera bajo la lluvia del lugar donde actualmente vivía el cumpleañero anhelando que estuviera adentro y abriera, era inevitable que la lluvia le empezara a empapar incluso utilizando de refugio su chaqueta. Pero no le importaba mojarse, mientras la caja que abrazaba contra su pecho con firmeza estuviera en perfecto estado, lo demás daba igual.
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¡ʟᵃ ᵉˢᵖᵉʳᵃⁿᶻᵃ ᵉˢ ᵗᵃⁿ ʰᵉʳᵐᵒˢᵃ~!
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¡ʰᵒˡᵃ ᵉˢᵖᵉʳᵃⁿᶻᵃ! ¡ʰᵃᵇˡᵃˢ ᶜᵒⁿ ⁿᵃᵍⁱᵗᵒ!
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⃟ꪴꪴꪴᩘᬸ҇⃟꙰ᬶ⃟➷ ¿Si estas ahí, Kamu-san?
murmuro por lo bajo.