Sitio más peculiar era aquel,, pero eso era lo menos a decir verdad; al menos a su parecer. Había terminado por fin de acomodar sus cosas,, ahora lo primordial sería inspeccionar el sitio junto con sus “ habitantes ”.
Su mirada carmesí cureosaba por las esquinas y pasillos,, esperando a encontrar algo que llamara mínimamente su atención.
Vaya, que aburrido se torno todo luego de un par de minutos casi que eternos.