Palpitando

Antes de decir "lo siento", caigo en la palabrería
          Hago las cosas con tiempo, para ser exactos, el último día
          Y antes de llorar, prefiero reír
          E irme de tu vera, si te doy la vara
          Tú verás lo que te esperabas de mí
          Yo, de ti, me espero todo, menos nada
          Tengo mil defectos para corregir, pero
          Pero, quién sería si de ello no hablara
          No sé hacerme el loco para no sentir
          Y amar con locura, sin ser un majara
          Si yo te contara
          Qué hay debajo este latido, vestido de gala
          Pájaros tejiendo nidos, tocados del ala
          Tigres jugando con fuego, pa', ser de bengala
          Y un millón de balas, bailando baladas
          Que, con dos palabras, siempre dicen
          Bang, bang
          Has fallado demasiado, se agotó tu tiempo
          Deposita en este cuenco tu materia gris
          Y vuelvo a mirar al suelo y puedo ver mis sesos
          Y, a pesar de ello, todavía pienso cómo explicar eso
          Les digo que da igual
          Para equivocarme siempre será un buen momento
          Ser un fallo, fue el acierto más grande que fui
          Nadie es veinticuatro horas cien por cien correcto
          Porque, incluso ser perfecto es un defecto, en sí
          
          —Ruleta Rusa. 
          De: Brock Ansiolitiko—

Pasan días y más días y solo se que si el tiempo regrresara al punto de inicio haría todo para poder volver a estar a tu lado.

Hasta que me digno a revivir esta cuenta muerta

Me gustas cuando callas porque estás como ausente,
          y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca.
          Parece que los ojos se te hubieran volado
          y parece que un beso te cerrara la boca.
          
          Como todas las cosas están llenas de mi alma
          emerges de las cosas, llena del alma mía.
          Mariposa de sueño, te pareces a mi alma,
          y te pareces a la palabra melancolía.
          
          Me gustas cuando callas y estás como distante.
          Y estás como quejándote, mariposa en arrullo.
          Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza:
          déjame que me calle con el silencio tuyo.
          
          Déjame que te hable también con tu silencio
          claro como una lámpara, simple como un anillo.
          Eres como la noche, callada y constelada.
          Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo.
          
          Me gustas cuando callas porque estás como ausente.
          Distante y dolorosa como si hubieras muerto.
          Una palabra entonces, una sonrisa bastan.
          Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto.
          
          —Me gusta cuando callas, 
          de Pablo Neruda—

Aveces me pregunto porque todavía sigo intentando escribir algo.

Obviamente iba a encontrar la manera de volver a la vida.

Oficialmente la lluvia ha vencido al calor, lo malo, parece ser que me estoy enfermando.

Doy asco para el deporte, pero que tremendas piernas tengo sin ninguna razón xd

¿Por qué lloramos por personajes que no son reales? Aunque es difícil que me pase, hay veces en que no puedo evitarlo, ¿El ser humano realmente puede ser tan empático para sentirse triste por algo que nunca existió? O ¿simplemente son personajes tan bien desarrollados que se sienten reales?

—¿Olvida usted algo?
          
          —¡Ojalá!
          
          —EL EMIGRANTE,
          de Luis Felipe Lomelí—