Siempre es complicado digerir el final de un juego, una serie o una saga de libros. Queda un vacío, una sensación de malestar extraña, que nunca pensé que se podía llegar a sentir como autor. Sin embargo, me ha llegado. Hoy ha acabado una etapa de mi camino como escritor, con el fin de uno de los proyectos que más he amado nunca, la historia de Lysaet Ross, uno de mis propios personajes con los que más me he encariñado nunca.
Ha acabado la segunda entrega de Historias del Reino de Agis, y ahora, la mirada ya está puesta en la tercera. Será un proyecto muy ambicioso, que va a implicar mucho trabajo, y que confío empezar a publicar en septiembre. Por ahora, trataré de publicar más XCOM y La perla española, especialmente la primera, que tengo más abandonada.
¡Muchas gracias a todos, un saludo!