Hoy he leído un frase que decía «Nunca, pero nunca te olvides de arriesgar. No estás haciendo el ridículo. Simplemente estás liberándote de un peso que vas a cargar el resto de la vida: la duda.»
Es entonces cuando he entendido que debemos arriesgarnos incluso sabiendo que tal vez no logremos nada, es por eso que no me doy por vencida con mi historia. Porque nunca he confiado tanto en mí como en este momento.
Por esto, también os animo a atreveros y a hacer las cosas que de verdad os gusten.