Uno de mis ídolos de infancia acaba de matarse. Liam, quizás no era ni la sombra de lo que conocí... Sin embargo, representó una parte gigante de mi vida, y llenó mi adolescencia de un amor que jamás había experimentado.
Fue causante de mi amor por la música, de mi interés por el inglés, de mi interés por la escritura. Gracias a One Direction fue que comencé a escribir.
La Helena de 12 años está llorando. Aunque no era una buena persona ya, me parece nefasto todo esto.
Las adicciones no son un juego, la salud mental tampoco.