La vida está llena de momentos, sean buenos o malos, siempre hay una enseñanza detrás de cada uno de ellos. 

Los buenos para aprender a vivir el momento, como si no hubiera mañana.

Los malos para aprender a apreciar la vida, y las personas que tenemos a nuestro lado a pesar de todo.

Pero otras veces, simplemente queremos escapar de todo, y desconectar de la realidad, de aquello que tanto nos agobia. 

No del todo, claro esta, siempre debemos recordar que es necesario tener los pies bien puestos sobre la tierra. Porque el mundo no es color de rosa.

A la final, todos queremos hacer una diferencia y dejar una huella; esta es la huella que yo quiero dejar. 

A través de los libros podemos ver el mundo de otra forma, desconectar de todo si estás mal y aprender cosas nuevas con cada párrafo.

Pero realmente no es sólo eso. El arte es la inmortalidad del artista, aquél que se propone a plasmarlo cómo es debido. 

Siendo un arte, la literatura, es la vida eterna del escritor, mientras el lector escapa de su realidad, y aprendé a ver la genialidad de cada historia. Siendo está una enseñanza, a libre interpretación de cada individuo.