¿Cómo se puede ablandar el corazón de la persona que amas, para que pueda darse cuenta de que tu cambio fue real? Un cambio desde el cual ya no quieres hacerle daño, sino hacerlo sentir bien. Sin embargo, él pone muchos obstáculos por miedo a ser lastimado otra vez, porque en el pasado tú lo heriste profundamente. Pero cambiaste a tiempo. Aun así, su miedo le impide ver ese cambio.
¿Qué hacer para sanar ese bello corazón que hace latir el tuyo? ¿Cómo borrar la tristeza de esa mirada tan hermosa, que cuando está feliz ilumina como el sol? Su sonrisa reconforta tu alma. Amar y estar ahí, incluso cuando ese ser amado te ignora por temor a que vuelvas a hacerle daño, es difícil. Pero tú haces de todo para demostrarle que has cambiado, por él.
Eso es lo que me pasa: yo cambié por él, y a veces parece que no lo ve, o le da miedo ver que mi cambio es real. Soy feliz solo con verlo feliz, pero me duele que sea frío y esté distante, porque mis sentimientos por él son sinceros. No estoy jugando; realmente me enamoré de él.
Reflexión final:
Amar a alguien que aún carga con el miedo que tú le causaste es una de las pruebas más duras del amor verdadero. Reconocer tus errores y cambiar por alguien que amas ya es un gran paso, pero no siempre será suficiente para que el otro sane al mismo ritmo que tú cambias. El perdón no se puede forzar; se cultiva con tiempo, paciencia y coherencia.
Si él aún no puede ver tu cambio, no significa que no exista. Significa que su dolor sigue nublando su visión. Lo más valiente que puedes hacer es seguir amando con respeto, sin invadir, sin exigir, sin dejar de ser tú. A veces el amor más genuino es el que sabe esperar... y también el que sabe soltar si es necesario para que ambos puedan sanar.
No olvides que también mereces amor correspondido, y que tu cambio, aunque haya nacido por alguien más, también debe servir para ti, para tu crecimiento, y para que tú también seas feliz.
