>>      Así soy yo, mi estrella brilla tanto que nadie ve mi fragilidad. Soy como la mujer invisible. Soy una presencia que se siente pero no se ve. Cuando ven que no necesitas nada, que puedes con todo, dejan de verte. Soy una sombra, una brisa que pasa. Estas presente todo el tiempo para todos... Toda mi vida brillé ¿Será por eso que nadie me puede mirar realmente? Todos pueden ver lo que doy, pero no lo que necesito. Entonces realmente nadie puede darte nada, si no pueden comprender lo que necesitas o si no se toman realmente el tiempo para descubrirlo. 

>>      Todos ven tus señales, tus destellos, tu brillo… pero pocos pueden ver cuando te apagas, cuando te derrumbas. Nadie puede entender realmente el dolor de no saber porqué un tío se ríe de una tía sólo porque no mola. Hasta la mujer invisible necesita esa mirada especial que la haga especial.