No sé si odiarte o llorarte en silencio,
si gritar tu nombre… o callarlo por dentro.
Dejaste mi alma rota en el suelo,
y aún así, te busco entre recuerdos y hielo.
Un corazón roto. El mío.
Otro en cenizas. El tuyo… o eso creí.
Pero en este punto ya no hay regreso...
O arde todo… o por fin resucito.
Cap: 61.
No sigas si temes,
las verdades duelen más que los lamentos breves.
Pero si te atreves… da un paso más,
lo que parece claro, pronto se irá.
No todo es luz, ni todo es juego,
hay giros que arden, otros que envenenan en silencio.
¿Sigues aquí? Entonces ya es tarde,
mis palabras te atraparon… y el final no será cobarde.