«Creí que cuando te marcharías, yo no sería nada. Pues tú me completabas. Ahora me dí cuenta que fue un error, otro a la gran lista.
Fue un error por creer que tú me hacías feliz cuando me hacías daño.
Me hacías sentir bien, única, incomparable.., y luego me arrojabas a una esquina por un mejor premio. Eso dolía, no te imaginas cuanto.
Pero lo único que pude hacer, fue simular que no me importó. Como siempre. »