Hola a todos, no quería dejar pasar un día más sin sentarme a escribirles estas palabras. Sé que he estado ausente y que el silencio se sintió largo, pero les debía una explicación sincera.
Últimamente, la universidad me ha absorbido por completo. Entre exámenes y responsabilidades, apenas me quedaba energía para respirar. Pero, más allá de eso, me ha tocado transitar por circunstancias personales muy profundas, de esas que te sacuden cada médula sensible y te obligan a detenerte para poder procesar la vida.
Escribir para ustedes es mi refugio, pero para darles lo mejor de El Pakhan de Rusia, necesitaba sanar y volver a encontrar mi centro. Les agradezco de todo corazón su paciencia y comprensión. Significa el mundo para mí que sigan aquí.
La espera ha terminado. Ya vienen más capítulos en camino y estoy volcando todo este cúmulo de emociones en la historia. Solo les diré una cosa: prepárense.
El final del libro es algo que no se van a esperar. He estado planeando giros que, les aseguro, los dejarán completamente sorprendidos.
Gracias por no soltarme la mano. La familia Alexandrov está más fuerte que nunca.
Con cariño, su autora en apuros:
F.P.