Siempre llega un momento en el que me detengo a pensar sobre lo que hice, lo que no hice porque no pude y lo que no hice porque no quise o porque tuve temor. En realidad no me arrepiento de nada, esta etapa etapa es para cometer errores y aprender de ellos, en algunos casos, en otros casos solo debemos ver los errores de quienes se encuentran a nuestro alrededor y de esa forma no dañar o lastimar nuestra vida y nuestros sentimiento tratando de experimentarlo nosotros mismos. Habrán ocasiones en las que para tomar una decisión debemos detenernos a pensar en el pasador, el presente y en el futuro, en otras ocasiones podremos decir que SI a la ligera sin tener que pensar en las consecuencias, en muchas otras ocasiones diremos que NO por miedo a equivocarnos pero, la respuesta que demos a esas decisiones nos llevaran a lo mismo, a dudar en el porque no pensamos antes de decir si o no, y si llegamos a pensar en la respuesta que daríamos nos cuestionamos el porque no solo dimos una repuesta.
La vida es una historia, nuestra propia historia, en la que podemos decidir que puede o no pasar en cada acción o decisión, sea cual sea, y con la que tendremos que vivir el resto de nuestras vidas porque la decisión así se tomo y lo que resta es el vivir buscando una nueva forma de mejorar nuestra vida cada día. Ya que los pensamientos del pasado son los que hacen nuestro estado de ánimo en el presente debemos cambiar nuestra forma de pensar y darle un vuelco positivo a los malos recuerdo, de la misma forma, debemos recordar aquellos buenos momentos y tratar de revivirlos en el presente.