A veces creía que yo era el problema real, bueno...es que trataba y trataba de hacer las cosas bien y no resultaba, pero y al otro lado, estaba siendo normal? Me di cuenta que por muchos años que uno prevalezca ciertos términos con tus familiares, amigos, conocidos, depende de ti poner límites para que no te hagas daño. Si eso es alejar a personas que al final no cumple con alguna regla lo mejor es dejar atrás. Cuando es difícil? cuando cambias, cuando los que están a tu al rededor no cumplen con eso, pero no te das cuenta porque tu amor es mucho más grande, que te ciegas a la idea de que ellos se han ganado ese lugar, pero cuando sales de ello recién te das cuenta lo mal que estuvo esa relación desde un principio. Quizás no hubieron malas intenciones, pero si la persona no coopera en crecer como persona, y no discute sus molestias nada más te espera que una bomba. No todo el mundo es como uno, no todos pueden ser sinceros, directos, empáticos y apoyadores al 100%. Cuando crees que todo está bien, que vas para delante con esas personas, ni siquiera te das cuenta que no se avanza porque esa otra persona es la que no quiere hacerlo. Es una locura no poder darse cuenta antes, te duele, te rompe, te asusta y te emputece. Pero al final del día, siempre será mejor retirarse como un soldado valiente. Di lo que tengas que decir sobre tus sentimientos, lo agradecido que estuviste y retirate. No importa que ocurrió en el pasado, porque en el presente sabes que era lo único que podías hacer en ese minuto. Ya no miro el pasado con resentimiento, porque se que si hubiera manifestado esos problemas, hoy ya no se solucionarían, solo me causaría dolor a mi misma. No olvido lo que me hicieron, tampoco perdono, Solo sigo para adelante porque se con total seguridad que al final del día a la única persona que le debo creer, es a mi misma y a mis convicciones. Mis valores están por delante de la perdición, quizás esta vez por ello no perdí algo, más bien yo gané buscar mejores personas.