Mundans

Eres demasiado fuerte para mostrar debilidad, demasiado hermosa para bajar la mirada, demasiado inteligente para actuar sin razón. 
          	Tú eres demasiado especial como para rendirse.

Mundans

De sus abultados labios desciende una pequeña hilera de sangre, sin embargo, la sonrisa se niega a desaparecer. El confía que la esperanza renacerá de entre los escombros de Margot y su pequeña flor reinará en la utopía que él siempre anhelo.

Mundans

Sostengo en mis brazos un cuerpo ligero con complejos pesados.
          Sus labios no me sonríen como ayer, incluso su mirada es oscura hoy.
          Con un suspiro siento su cuerpo temblar bajo mi tacto.
          Me enfado conmigo mismo al dejar ver mi debilidad.
          Comienzan gotas a descender por sus rojas mejillas.
          Y mi motor de vida se desase dentro de mí.
          Susurro palabras de amor en un intento de consuelo.
          En respuesta su llanto crece.
          Me dice que está bien, que sólo necesita tiempo.
          Pero mi tiempo está a punto de terminarse.
          Él lo comprende y me mira aterrorizado, sujetando mi camisa manchada de sangre.
          Grita algo que soy incapaz de escuchar.
          Me pierdo en la oscuridad anhelando ser amado.