Winnie y Augustine estaban en una tienda para comprar ropa o comida. Mientras caminaban, pasaron junto a una tienda de peluches a la cual Winnie se puso a ver los peluches que habían en exposición.
Mientras Augustine seguía caminando, de repente sintió como Winnie lo agarraba del brazo y lo agitaba con emoción.
—Auggie Auggie! Tienes que ver esto!—Decía mientras lo arrastraba para mostrarle un peluche de alce que tranquilamente podría caber en toda una habitación.
—Me lo compras? Ya me quede sin plata— Augustine observo el peluche por un momento, dudando un poco.
—Si, pero uno mas pequeño— Respondió, volteándose a ver a Winnie, el cual ya lo estaba viendo con ojos de cachorro. —Ugh... Esta bien, pero luego me devuelves el dinero—
Winnie dio un pequeño salto de emoción, abrazando a Augustine mientras lo llevaba a la tienda, sabia que iba a funcionar. Y Augustine solo se rio un poco.