Fui a un museo, y pude presenciar en persona varios cuadros que veo en las clases. Entre ellos el cuadro de San Martin y Simón Bolívar, en el tratado de Ayacucho. Pero entre los más impresionantes estaba La muerte de Sócrates, y uno que se llama ", Dios mío, que sólos se quedan los muertos!"