Tienes bordeline.
Aún recuerdo la primera vez que escuché mi diagnóstico; ‘no tiene cura’, empezó a razonar mi cabeza, así que el: ‘es tratable’, ya no importo, ya no había una salida y todo dejo de tener sentido para mi.
Siento que todo está mal en mi, que todo lo que toco lo arruino. Necesito amor, pero no puedo parar de alejar a todos.