Todos llegamos a ese punto de quiebre, de inflexión y sin retorno.

La princesa se tiró de la torre...

...y siempre, tras toda caída libre, viene el impacto.



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Fue en la primavera del 2019 en la que todo colapsó, en la que mi mundo se desmoronó y todo se vino abajo.

"Normal" no es una palabra que vaya conmigo. Puedo ser común y no tener nada de "especial", pero siempre he sido tan extremista y terca. Mis berrinches son por las cosas más estúpidas que hay y soy irracional al aferrarme a algo que me hace daño. No encuentro punto medio, pero siempre, siempre, siempre... regreso al mismo refugio: Las letras.



Supongo que un texto es esa burbuja que nunca falla.

Los libros, las historias, los cuentos y poemas no te pueden lastimar como las personas o la vida real.

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