En estos casos, yo pienso que todos tenemos la libertad de elección y, en el mio, yo elijo atarme a la razón, a la moralidad, al arrepentimiento y responsabilidad, porque me niego a herir a otros sin fundamentos, porque no quiero hacer las cosas más difíciles a otros, elegí mis cadenas, mis ataduras y estoy contenta, porque a pesar de todo, sigue siendo mi elección, mi libertad son hilos, son cadenas, mi libertad son elecciones, son decisiones, esa es mi libertad
Y justo por eso, la idea de volar como un ave se me ocurrió un par de veces, pero recordaba cientos otros de factores, entonces prefería imaginarme mundos, historias, donde ser alguien y ser nadie, existía, pero nadie sabía de mí, ¿Saben por qué?
No esperaba libertad, lo que siempre quise en toda mi vida era una cosa; Calma, tranquilidad, paz. Cualquiera de esas, quería irme lejos de todo problema, de toda saturacion, porque era agobiante.
Una casita, cerca de un bosque, un lago, rodeado de árboles, en verano o primavera, con el sol iluminando. Pero la oscuridad siempre me persiguió, recuerdo al inicio tener miedo, pero estaba obligada a estar a oscuras, obligada por alguien que le tenía miedo a estar a oscuras, ¿no es gracioso? Irónicamente cauteloso, poco a poco el miedo cambió a costumbre y después a comodidad y confort
Me gustan mas cuevas, porque son oscuras, me gustan los osos porque viven en cuevas y son lindos, me gustan las cuevas porque siempre miraba a la oscuridad y cuando cerraba los ojos para imaginar, si me quería ver a mi, era saliendo de una cueva que daba a un bosque y de ahí, como si fuera una película, avanzaba un poco y me encontraba con otras historias, poco me importaba saber de mi, solo lo justo y necesario. Nunca fui protagonista, ni siquiera para mi misma, pero me daba esa calma, esa fantasía y comodidad de observar, a veces sí quería protagonismo, pero siempre temporal, me gusta observar