Se supone que solo iba a subir historias completas aquí, no sé en que momento se torcio todo
Quizá cuando mi laptop empezó a calentarse más que parrilla o cuando la pantalla empezó a parpadear. Intenté escribir en la computadora del trabajo, pero fui avisada de que no tenía que tener archivos no relacionados con el trabajo en horas laborales, nunca se me ocurrió que podían ver mi pantalla.
Después de ese susto me puse la meta de ahorrar para comprar una, pero ya en dos años no se dió, por una u otra cosa.
A principios del año pasado me regalaron una, estaba que saltaba de felicidad, pero por alguna razón en la nueva no podía instalarse office y no abría archivos con la extención Word.
Se me rompió el corazón.