Mi verdadero nombre no importa; mis historias, sí.

Llámame NER. No Es Relevante. Porque los nombres son efímeros, pero las palabras permanecen. Porque una vez que cruzas el umbral de este rincón, no estás aquí por mí, sino por lo que escribo.

Bienvenido a mi mente, un lugar donde la oscuridad y la imaginación colisionan sin permiso. Aquí no hay censura ni finales felices garantizados. Mis historias son espejos rotos donde los personajes sangran, las emociones pesan y la realidad se deforma con cada página.

No escribo para agradar. No escribo para ser entendida. Escribo porque las palabras son la única verdad que tengo. Si decides quedarte, si decides sumergirte en mis mundos, hazlo sabiendo que podrías no salir siendo el mismo.

Este es mi rincón. Este es mi caos. No es para todos, y eso me encanta.