Hoy es el día mundial de la prevención del suicidio, no voy a hablar de estadísticas porque esas no me las sé, pero vengo a reflexionar sobre ello.
Mi historia también es triste como cualquier otra, y en cada etapa quise morirme, desde los 12-13 años empezaba a sentirme triste, por cosas que no podía controlar, a los 13 algo denotó esa tristeza y esos deseos de morirme, odiaba verme, odiaba mi cuerpo, odiaba mi vida, odiaba ser yo.
Yo no era muy religiosa, sin embargo, cada noche pedía a Dios o alguna entidad morir, lo deseaba tanto, a veces no podia respirar, me sentía tan ahogada, tan infeliz que no podia controlarlo, todos los días lloraba, escuchaba alguna canción de desamor y aunque no había pasado por eso, lloraba.
Pasé el primer día del padre sin mi abuelo, y encontré la excusa la excusa perfecta para empezar a hacerme daño, y no, no hay cicatrices porque era y aún soy cobarde como para hacerme daño hasta ese punto, pero eso me ayudaba a canalizar lo que sentía, en vez de llorar por cierta situación lloraba por el pequeño escozor.
Mi familia no sabe que pase por esos momentos, solo piensan que siempre estoy "cansada" o como le dicen aquí, "con calihueva" no les dije porque me da miedo que no me apoyen, que no lo entiendan y que solo me digan que es una etapa, porque aunque nunca haya ido a un psicólogo, se que no es normal sentirse así, tan gris y vacío.
Así que la reflexión de hoy es la siguiente:
* Si puedes involucrar a tu familia para que te ayude o escuche, hazlo. Tener el apoyo de ellos te va a ayudar a enfrentar cualquier situación, no tomes mi ejemplo.
* Si te sientes muy mal, recuerda que habrán más días y más noches. No es una etapa, es parte del proceso.
* Si puedes ir a un psicólogo, ve y hazlo por tí, porque quieres mejorar, porque te quieres sentir mejor.
* Hacer ejercicio dicen que ayuda, hazlo en el proceso te pones buena/o y recuperas tu estabilidad emocional, es como un 2x1, piénsalo.