──── Uhm... ¿Detrás de un barril? —Rascó su nuca pensativo— ¡Bien, podría intentarlo! —Sin dejar que la petición (por casi imposible que pareciera) lo desanimara, intentó mantenerse positivo y con el espíritu en alto—. ¡Seguiré tu entrenamiento, Maestra Sayu!