Sarime
Aquella noche dormimos abrazados, pero antes jugamos a eso tan peligroso que las parejas gustan de probar alguna vez: hacerse promesas. Y nos prometimos no dejar nunca de gustarnos como éramos, Que no se nos olvidaria jamás como hacer sentir felíz al otro. Que siempre nos respetariamos Y que el resto de las noches de nuestra vida Las pasariamos hundidos el en mí y yo en èl. Y vaya por Dios no cumplimos ni una. #PersiguiendoASilvia