Buenas tardes, amor de mi vida.
¿cómo estás hoy, ayer, antier? no sabes cuanto extraño tu voz, tus chistes, tu risa, tus ocurrencias, tu piel, tu aroma. Siento como cada día me consumo sin ti, cielos, de verdad anhelo encontrarte siempre porque no imaginas cuánto te amo y espero estés bien, espero nunca olvidar el sonido de tus burlas o cuando estas malhumorada, pero siempre será inolvidable nuestros momentos íntimos, todos aquellos donde tú te abres a mi y yo puedo abrirme a ti, convirtiéndonos en una sola pieza.