SoyLenoreBirdwhistle

Vizconde Bridgerton, que agradable bienvenida me ha dado. Así es, mis vacaciones estuvieron más que satisfactorias; aunque no puedo negar que aproveche parte de ello para estudiar un poco, nada que tenga que ver con como aprender a sentarme derecha, si puedo serle totalmente franca. Me dió gusto verlo, por favor, envieles un saludo de mi parte a su familia, les tengo gran estima. 

SoyKateISharma

Mi lord. No contaba con su temprana presencia, pensé que un hombre tan ocupado como usted estaría en una fiesta. ¿Acaso su madre no estaba presionándolo a encontrar esposa? Pero no se apure mucho, porque por su arrogancia, estoy segura de que nadie querrá acercársele.

SoyKateISharma

(+) caballerismo, pero ahora soy yo quien debe cargar con la humillación pública por haber caído encima suyo como… Como una… ¡Como si fuera su amante! —vociferó, dejando de apuntarlo para poder darle ahora un golpe en su pecho—. Y eso sería imposible porque lo odio. ¿Cómo no hacerlo? Si es el hombre más repugnante, descarado, salvaje, inmaduro, egoísta, narcisista…
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SoyKateISharma

(+) oyó la imponente y fuerte voz del vizconde. Kate giró sobre sus talones con ceño confundido, tratando de contemplar el rostro de Anthony entre la oscuridad con la iluminación de la luna y estrellas, pero se dio cuenta que no necesitaba hacer eso porque las facciones del hombre habían quedado grabadas en su mente para siempre, incluso si decidía marcharse a India una vez su hermana sea desposada. 
            
            Él hablaba rápido como si estuviera recitando un complicado trabalenguas infantil y su apresurada respiración creaba cortinas de humo debido al gélido clima del exterior. Los pasos de Anthony parecían acercarse más a ella mientras se hundían con más insistencia sobre la tierra seca. La mente de Kate giraba como Newton jugando con su cola, dando vueltas y enredándose con sus propias ideas, viéndose incapaz de idear algún comentario borde que demostrara el rechazo y desprecio que tenía por el vizconde. Porque así era, ¿no es así? Ella lo odiaba. Sin importar qué ocurriera, el corazón de Kate latía por el desprecio que sentía por Anthony. 
            
            —Usted no es más que un insufrible hombre con tendencias a tener a cualquier mujer a su disposición como si fuéramos objetos de entretenimiento. —soltó, también acercándose brutalmente hacia él. El ceño de Kate estaba fruncido y su mentón elevado, derrochando arrogancia y terquedad y procurando no dejar en evidencia que el ritmo de su corazón no se tranquilizaba. Olvidándose de dónde se encontraban, en un sitio público donde todos podían verlos, lo apuntó con su dedo índice y apoyó el mismo sobre su pecho—. Es despreciablemente arrogante. ¿Es eso lo que quería, mi lord? ¿Que sea el bufón de todos los presentes cuando me empujó hacia usted? ¿Que sea el entretenimiento para todos sólo porque así usted lo quiso? ¿Qué fue lo que pensó? —cuestionó con evidente molestia cerca de su rostro, apretando su mandíbula y respirando agitadamente—. Pudo haber lidiado solo con la burla del pastel por un par de días como muestra de (+)
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SoyKateISharma

Fuera, en el jardín, el viento soplaba fríamente, recordándole la temperatura que debía cubrir el corazón del vizconde. ¿Cómo podía ser posible que un hombre como él fuera tan desconsiderado con ella y decidiera sumergirla en el caos de habladuría de este catastrófico evento? Kate estaba segura de que, ahora que ella se había retirado, las casamenteras estaban riéndose de ella. ¿Cómo no hacerla objeto de burla si ella misma sentía cuán pegajoso estaba su cuello, busto y rostro gracias a la mezcla y respectiva crema? 
            
            Ese hombre no era más que uno narcisista que se preocupaba por sí mismo y sus arrogantes intereses. Por su culpa, sus guantes estaban estropeados y sabía que no podría usarlos de nuevo, por lo que se los quitó con movimientos frenéticos y furiosos y los estampó contra el césped. El pecho de Kate, cubierto por grandes manchas de crema con diminutos trozos de pastel, respiraba de manera agitada. No podía terminar de procesar qué fue lo que ocurrió dentro del salón, porque Kate sólo se pudo aferrar a una equivocada idea que acababa de aparecer en su mente. 
            
            Anthony Bridgerton no era un hombre frío. En realidad, ella nunca había conocido a un hombre tan entusiasta y apasionado por las cosas como lo era él. Se preocupaba por su familia y lo demostraba con acciones, no con palabras, porque Kate podía notar que el vizconde no era bueno expresando sus sentimientos de manera verbal. Su devoción a los Bridgerton lo convirtió en un perfecto padre para sus hermanos menores y siempre, de alguna forma u otra, los alentaba a ser ellos mismos. ¿Cómo podía convertir eso a Anthony Bridgerton un hombre sin calidez en su corazón? Por primera vez, Kate se sintió culpable de haber tratado tan desagraciadamente a un hombre que sólo sentía demasiado. Su corazón comenzó a latir con rapidez y ansiedad dentro de su pecho, sintiendo cómo el peso de su comportamiento en los últimos días turbaba su mente. 
            
            Salió rápidamente de sus propios pensamientos con un sobresalto cuando (+)
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