/ ⠀El acceso completo a la cavidad ajeno
hizo que una de sus características sonrisas
egocéntricas del vigilante se dibujara en sus
labios; No dudó siquiera ni un segundo, cuando
paseó si previo aviso su lengua dentro de él.
La respiración cada vez se volvía agitada,
avisando que necesitaría oxigeno pero para
el moreno no era suficiente, necesitaba más..
por lo que entre más profundo dió el ósculo,
más su hambre hacia el ajeno aumentaba.
Cuando cortó el beso, unidos por un pequeño
pero significativo rastro de saliva, este no se
detuvo y se inclinó a mordisquear y succionar
su cuello blanquecino. Dando como resultado,
una dolorosa hematoma evidente. Ah... Mira,
que bonita marca tienes, Wayne. Me
"disculparía" pero no hay nada porqué deba
hacerlo y jamás pediría perdón al respecto.
Demonios, eres tan precioso.. ¿No te cansas?.