ㅤㅤHarry.

/ NO ME PUDE CONTENER.

Sin esperar un segundo más y con el corazón latiente, el ojiazul salió a buscar al chico que estaba robándole los suspiros y los pensamientos con algo de impaciencia. Sentía un leve cosquilleo recorriéndole el cuerpo debido a la adrenalina de sus ya conocidos actos impulsivos y de la decisión que había tomado en ese momento. Claramente no había pensado en las consecuencias, en lo que podría salir mal y en las miles de incógnitas sobre la incertidumbre de demostrar afecto en frente de todos pero intentaba callar los pensamientos negativos diciendo que se podría preocupar después. De cualquier modo la gente siempre hablaba y a él le había dejado de interesar cuando entendió que a la única persona que debía serle fiel es a sí mismo. 
            
            Después de unos momentos caminando sin rumbo pero con la mirada fija en encontrar lo más valioso que tenía, se encontró con aquellos ojos grises que siempre lograban dejarlo sin aliento y por un momento la valentía se le fue. La sonrisa boba que tenía cada que hablaba con él se hizo presente al igual que ese color rojizo que adornaba sus mejillas cada que le decía algo dulce, se dirigió hacia el tejón finalmente pensando en que no era la mejor idea que tenía pero no perdía nada con intentarlo. Ser estúpido pero con coraje era su especialidad.
            
            Sin previo aviso, tomó el rostro del Hufflepuff entre sus manos y empezó a depositar pequeños besos en todo su rostro. Tuvo que pararse levemente de puntillas pues la diferencia de altura era más que notoria sin embargo disfrutó el momento íntimo y dulce, haciendo un camino suave desde su frente, pasando por los ojos y nariz, siguiendo en las mejillas, intentando capturar cada parte de sus facciones y acabando rápidamente en los labios. 
            
            —¿Te he dicho ya que te amo? —soltó en un murmuro para después quedarse levemente estático por lo que acababa de hacer y de decir también. 

/ PERDÓN POR OTRA DE RED VELVET PERO AAAAAA.

Te amo. 

/ NO SÉ Q ESCRIBÍ, PIDO PERDÓN. 

La canción que acabas de dedicarme me ha puesto en el modo más cursi que jamás había imaginado tener. Puede que haya sido la melodía suave que instantáneamente me recordó a ti o la letra dulce que hizo mi corazón derretirse a más no poder. Siempre te quejas de que te tomó desprevenido pero tú no te haces una idea del efecto que tiene en mí como siempre dices cosas tan adorables, tan alegres y tan lindas igual a ti. Me paralizas. Me haces pensar en una respuesta coherente por horas y aún así nunca lo encuentro porque revuelves mis ideas. ¿Sabes porqué yo escogí la canción que decidí decidirte hoy? La letra habla sobre conocer a alguien aunque sea una persona con la que nunca has hablado. Surge de manera espontánea pero como si estuviera predestinada, surge una conexión especial, una que sólo entendemos nosotros y no importa cuanto tiempo nos hayamos tardado en darnos cuenta, no importa a donde vaya el otro, siempre nos volveremos a encontrar. Marcaste mi alma y espero que te hagas responsable por ello. 

Sisisii.

/ HOLA, CANTEMOS ESE DUETO O LLORO. 

Y sigues haciéndome sonreír como un completo bobo. Ya he aclarado muchas veces que lo soy y más con tus palabras pero ahora de verdad es más notorio que otras veces. Me haces sentir feliz, alegre y como si fuera invencible. Ahora sé que puedo derrotar a cualquier monstruo o mago tenebroso porque te tengo a mí lado y conmigo. No me hace falta nada más. El único chico afortunado aquí soy yo, aún me cuesta trabajo creer que todo esto sea real. El que pueda decirte sin miedo lo que siento por ti, el que pueda abrir mi corazón e intentar mostrar esa faceta más suave contigo. Me cuesta trabajo creer que eres real. Creo que ahora quien se desmayará soy yo, es increíble cuando lo digo pero escucharlo de ti es, no sé. No lo sé pero fue un gusto haberte conocido, nos veremos en otra vida por el ataque de amor que estoy teniendo. 

Ahora estoy seguro de que el único adorable aquí eres tú. Siempre tienes las palabras correctas en el momento indicado para derretirme, aún no tengo idea de cómo lo haces, deberías enseñarme. ¿Es posible que me enamoré más de ti con cada segundo que pasé? Cada vez me siento más cautivado que el anterior. Lo que digas, señor caja de sorpresas. ¡Casi lo olvido! Te amo.

Pido amablemente por milésima vez en lo que llevamos de esta semana que no me llenes de cumplidos de esa forma tan dulce que tienes, Merlín no tengo la menor idea de que responder. Intento e intento pensar en algo pero las palabras simplemente no son las correctas, no hay manera de describir lo que siento por ti, no hay manera de describir lo que causas en mí. Y definitivamente no hay manera de describir cómo es que ahora el que casi se desmaya soy yo. Veo que imitas mi manía de decir cosas de manera desprevenida pero por Godric, Cedric lo tuyo fue un exceso. Uno tan grande que prometo deje de respirar por unos momentos y mi mente quedó completamente en blanco. 
            
            Tuve que revisar más de diez veces que mi horrible ceguera no estuviera jugándome una mala broma y hasta ahora, aún no me creo que lo hayas dicho. No puedo creer que hayas dicho esas dos palabras que en mi vida alguien me ha dirigido, no puedo creer que alguien tan increíble como tú esté aquí abriéndome su alma sin temor, no puedo creer que sea tan afortunado para ser la persona que, bueno, amas. Me siento cohibido al decir la palabra porque jamás he sabido lo que es amar de verdad y mucho menos he dicho esa frase a alguien, soy demasiado torpe con estas cosas cómo podrás notar pero, ahora veo lo simple que es. La manera en que me traes calma, la manera en que me encuentro adicto a tus labios, a la sensación de tu mano entrelazada con la mía y más cosas cursis que realmente me avergüenzan decir, es amor. Lo que yo siento por ti, es amor. La realidad, es que yo te amo. También te amo. Sin remedio, sin orden, sin esperarlo, te amo. Merlín, estoy que salgo corriendo sólo para gritar a los cuatro vientos que, bueno, ya no lo diré mas por ahora, no quiero sonar tan intenso.

Soy gran admirador de la forma en que hablamos de lo más trivial y simple para pasar a ponernos todos melosos. Adoro la forma en cómo puedes transformar mi cabeza pesimista y sarcástica en una más amable y abierta. Eres el único que realmente me ha visto así, de esta manera tan cursi, tan torpe y boba. Todo por la manera gentil en la que robaste mi corazón, todo por la manera en que decidiste marcarlo y confío plenamente en que lo tengas. Es tuyo, te ha pertenecido siempre. Igual debo decir que me encanta la manera en que con emoción y entusiasmo me cuentas tú día o algo interesante sobre ti. Eres como una de esas cajas de sorpresa muggle, siempre con algo nuevo para hacerme derretir. Algo nuevo para que caiga más enamorado de ti si es que eso es posible. 

Mamá Harry es la mejor.