Lexie.

¿Y ese es el mejor saludo que tienes para mí, tu amigo del alma, a quien le juraste amor eterno y compañía a tiempo completo? Que decepción. Lexie tiene la culpa, ella te aleja de mi. No olvidaré que me dejaste plantado con la consola y las cervezas hace dos semanas porque "tenías algo más importante que hacer". ¿En quién te has convertido? ¿Nada de lo que hemos vivido es suficiente para ti? No, no quiero abrazos, aléjate... ¡Broma, broma! Hermano, te has hecho extrañar tanto, ya en serio, no me vuelvas a dejar de esa manera. Te agradezco la bienvenida pero más feliz me haría reunirnos a beber algo como antes. 

Agradezco la bienvendia y el cumplido, Cedric. Es un gusto conocerte.

Te lo agradezco, Cedric. Es un gusto verte. Me he topado con tu melliza hace un rato, son realmente parecidos. Por un momento pensé que eras tú con peluca. 

¡Cedric Diggory! El chico de oro más codiciado de la historia, o al menos eso he escuchado. Bienvenido seas, tejón.

¿Te acabas de dirigir hacia mí como «otro» de tus tíos favoritos? Hablaré seriamente con tu madre, Cedric. Te entregaría mi impresionante adquisición de mi viaje a Francia con gusto, pero resulta que algún diablillo de los que tenemos en casa la sacó de mi bolso. Todavía debo descubrir si fue uno de los tuyos o, más bien, las crias de Peter. Gracias, sobrino.

La respuesta a eso es fácil; los niños. Tus hijos son unos pequeños engendros diabólicos que siempre quieren que les esté dando galeones. ¡Soy sólo una mujer con dos mascotas y una casa que mantener! No puedo darle más galeones a tus hijos, los cuales seguro se gastan en Sortilegios Weasley o en cervezas de mantequilla. ¡Oh, Lexie!, ¿está por aquí? No sabes cuánto la extraño. Siento que no nos vemos hace meses. 

¡Cedric Diggory! Amigo, tengo siglos sin verte. ¿Acaso tu hermano no te pasa la invitación para ir a beber que siempre hago? Tendré que hablar con ella seriamente. Bienvenido seas, amigo. 

¡Buenas tardes, señor Diggory! Me crucé con su madre hace unos instantes, seguro que estará contenta de verlo. Sea más que bienvenido. 

¡Cedric, hijo! El único que tiene sentido común en la familia. Dile a tu mamá que deje de ser tan molesta y que me deje en paz, estoy apunto de morir por culpa de todas las barbaridades que salen de sus venenosos labios. Por cierto, dejando a tu loca madre de lado, bienvenido seas, me alegra tanto verte, de verdad. Me siento tan anciano al ver todo lo que has crecido, ya no lo hagas más.

¡Ah, señor Diggory! Bienvenido sea. Seguro que su familia estará feliz de verlo.