—en el pelinegro se notaba el dolor en su rostro, la puerta quedó abierta a su vez que se acercó al otro— Maverick... —Susurró a su vez que lágrimas comenzaban a caer por su rostro —
No me importa las consecuencias. —Dijo a su vez que se recostaba por un momento de la pared y de un momento a otro se habría un callejón con luz al final.