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Espero no la hayas torturado tanto y que haya estado tranquila contigo. Si quieres tomarlo como libertad, adelante.

— es que, fueron chantajeados por sus emociones. la razón no es que sean humanos o no, cada persona que tenga emociones puede ser chantajeada o manipulada para conveniencia del enemigo. tu debilidad en este momento es laufey, no porque ella sea más débil, si no por laufey relación que tienen. e igual con cualquier persona que tengas una relación, pueden usarlo en contra tuya. todo tiene un riesgo, fenrir.  — su mano se afianzó con la adversa, descansando la otra sobre ambas, aún con aquellas sutiles caricias. su cabeza acabó recostada del hombro del mayor, sus ojos entrecerrados mientras lo escuchaba. — tienes razón, nada te asegura que la situación no se vuelva a repetir pero, salieron victoriosos, ¿no? enfócate en eso, enfócate en lo que pueden hacer y no en lo que no pueden. claro, que si hay cosas que mejorar pues, eso se trabaja. pero ya vencieron una vez, ¿qué te dice que no pueden hacerlo de nuevo? tienes que confiar en ti, en tus habilidades y en las habilidades de laufey. ¿esto ya lo hablaste con ella? más que miedo, puede ser trauma, ambos pasaron por muchísimas cosas en el problema con sukuna, es normal, más que normal e incluso me sorprende lo firme que están considerando todo lo que perdieron. no es fácil, pero temer no te hace débil. es una faceta de ti que honestamente no pensé que vería nunca, pero te hace más tú. no te sientas mal por tener miedo. 

observó cada una de sus acciones, comprensivo y en un intento de reconfortarlo se acomodó más cerca suyo. su diestra descansando en aquella pierna que movía con ansiedad, dejando caricias en esta y su mirada aún fija en su rostro.  — no, eres una maldición, aunque suene algo feo, eres superior a los humanos en todos los sentidos, así que también es normal que no quieras ser como nosotros. — una sonrisa tranquila se posó en sus labios, ladeando el rostro. —  el miedo es normal en todas las criaturas, fenrir. es algo que aunque no nos guste, sentimos porque es parte de nosotros, eso no significa que eres débil ni te hace menos maldición ni te quita de tu técnica maldita. eres fuerte, muy fuerte, no deberías de dudar de tus habilidades. sukuna era un caso aparte, ¿no?  — cuestionó con voz baja.  — se que te preocupa laufey, y no ser capaz de protegerla cuando pase otra pelea, pero si ambos están juntos, podrán contra cualquier cosa que se les interponga, por más cursi que eso suene. no te sientas mal por temer, hasta la bestia más fuerte puede tener miedo. 

que estemos conscientes; desde que dejé la casa de papá mi memoria ha fallado en lo más mínimo, pero ahora son muchas cosas las que no recuerdo. me da miedo. / admitió, alzando la vista a él y frunciendo más el ceño ante su risa. acabando por reír con él.  un time out es lo que no quiero. llevo esperándote todo el día, lo menos que querría sería alejarte por más tiempo por una tontería.  / exhaló, rendido y tiró de su camisa para plantar otro beso en sus labios.  ¿quieres un masaje? tuviste un día muy largo, deberías descansar. de paso me hace sentir menos culpable.  / sonrió. 

al parecer es lo que sucedió, aunque estaba más que seguro que era hoy que teníamos que. ir. había planeado todo lo que íbamos a hacer ya. dije que iba a pegar la nota pero también se me olvidó; te digo, últimamente se me olvidan demasiadas cosas.  /  volteó la mirada a él en cuanto lo sintió a sus espaldas y tomó una de sus manitas, acariciando sus dedos mientras leía.    a cualquiera claro. pero ya yo me estaba preparando para pelearte y reclamarte toda la noche por haberte olvidado de mí y de nuestra salida. así que eso me hace culpable.  / se alzó un poco y depositó un beso sobre sus labios. y por ello te pido disculpas. estaba más que listo para enfadarme por algo que nunca fue tu culpa. 

estoy seguro de que si, o eso quiero creer. últimamente apenas soy capaz de recordar bien las cosas, mínimo esto lo quería recordar bien, llevo toda la semana pensando en ello.  no te disculpes por lo de laufey, eso yo lo entiendo perfectamente.  / frunció el ceño y dió media vuelta, dirigiéndose al calendario que tenía sobre el escritorio para revisarlo.  ¿ves? ya me estoy volviendo loco— no era hoy. / soltó un bufido y se volteó a él, mostrándole el calendario.  es la otra semana… / murmuró con algo de vergüenza.  lo lamento. 

deja de juzgarme por mis preguntas. ¿huh? 
            ¡¿estás loco?! ¿por qué harías eso? es que soñé que había sucedido algo así, o sucedió, no lo sé, no recuerdo bien. 

en plan, mi vida, y la vida de alguien más, u otra cosa, hipotéticamente hablando, claro. 

entonces fue muy reciente, fen, seguramente eso le está afectando muchísimo todavía. ¿pasaba mucho tiempo con él? estoy más que seguro que lo extraña y que todavía está en duelo. no me agradezcas, para eso estoy aquí. a la próxima cuando terminen de entrenar, tráela para acá. quiero hablar con ella también, no sé, tal vez algo de distracción la ayude.  / aquella sonrisa se expandió cuando besó sus nudillos y aprovechó con su pulgar para acariciar los labios adversos. volvió a observarle con atención cuando éste probaba la sopa.   ¿nunca? en aquella casa solía comerla mucho en el desayuno, nunca aprendió bien la receta, pero si tú dices que está bueno, me conformo. así es, ya mañana cuando te vayas a comer lo verás, es sorpresa. también guardé un poco para laufey, no seas tacaño. hazlo con calma, fen, la idea es que se abra, no hacer que se cierre más emocionalmente. 

y lo bueno de todo es que fue para bien; aunque al inicio no te soportaba, tan arrogante como eras, me alegro que todo eso haya cambiado. eso mismo fue lo que empezó a hacerme dudar sobre mis sentimientos por ti, la manera en la que cambiaste completamente y comenzaste a cuidar de mí, aflojó algo dentro de mí. no lo sé, ahí empecé a verte con otros ojos y en vez de parecerme molesta tu actitud, comencé a comprenderla también y empezó a gustarme. nunca te habría dejado, entiendo de dónde venía la duda pero desde el momento que me empezaste a atraer, ya estabas atado a mí, así que la posibilidad de que eso sucediera, era nula. mhm, amaba hacerlo y aún lo hago, es muy divertido, pareces papá frustrado. ¿por qué no sería merecedora? laufey es un amor, que tontería. merece que alguien la ame con todo su ser y que se preocupe por ella de igual manera. 

ha de ser eso, mi amor. ¿fue hace poco? aún más si no fue hace tanto. me preocupa también que no descanse, habla con ella antes de que se sobre esfuerce mucho y le acabe sucediendo algo peor.   / sonrió cortito y se sentó frente suyo a la mesa, descansando sus brazos en ella y su cabeza sobre sus manos mientras lo veía comer. tomó el tazón pequeño del adverso y se lo llevó a la boca, probando un poco de la sopa.  quiero que la pruebes, nunca había preparado una miso. ¿ah? ya lo guardé, te dejé el tupper en el refrigerador junto con otras cositas. me avisas como terminan las cosas, ¿está bien? 

— eres un egocéntrico. — formó un pequeño mohín y descansó ambos brazos de su pecho, tocando con sus manitas aquellos hoyuelos que le parecían tan bonitos. sonrió contra sus labios de igual forma, alargando éste para después morderlo suave. — amo tu sonrisa, todo de ti en general, pero tus hoyuelos te hacen ver más adorable. 
            
            — o sea si entiendo lo de ellas, pero que no te miren tanto, ¿acaso no respetan? no me gusta esa mirada lujuriosa que algunas te dan, me incomoda. con razón tienes el ego tan alto, señor encantador. — burló, abrazándose a él por un segundo.  — a mitad de año seguiré pensando lo mismo, te lo puedo asegurar desde ahora. ¿desde hace cuánto estamos juntos? no se volverá molesto para mí estar contigo, mucho menos si estamos solos en una habitación encerrados. podría distraerte con muchos besos para evitar que te quejes o con otras cosas, hay muchas maneras.  — entreabrió los labios, recibiendo con suavidad todos los besos de el mayor. — ¿un impostor? ¿quién querría imitarte, amor mío?  — bromeó. 

— Gracias, es algo ya sabía, pero que esperaba que admitieras en voz alta… ¿mis hoyuelos—? —Antes de que pudiera seguir hablando, su voz fue interrumpida por los labios del chico, provocando que una pequeña sonrisa boba se dibujara en su rostro al mismo tiempo que hacia su intento por corresponder rápidamente al beso.
            
            — Si eso provocan mis hoyuelos, tendré que sonreír más seguido… bueno, pero son chicas, lamentablemente para ellas no hay tantos hombres guapos en la tierra, los pocos que hay son imbéciles ó gays, así que no hay problema, todo lo que dicen lo tomo más bien como un halago que como un coqueteo. — explicó en voz baja, mientras una de sus manos se dirigía hacia el cabello del chico, permitiéndose enredar sus dedos entre el mismo.— Eso dices ahora, pero no creo que a mitad de un año sigas pensando que “no es soportar”… Laufey dice que soy quejoso, Tsukiyomi dice que cuento chistes malos, y ambas están de acuerdo que si tuvieran que escucharme seguido, terminarían durmiendo una eternidad… me odian. —comentó lo ultimo en broma, mientras acomodaba sus lentes de aumento antes de perseguir los labios contrarios para prolongar el beso, al separarse continuo brindándole breves y suaves besos.
            
            — ¿Uh? ¡Pero que tal si no soy yo! Jamás me dispondría a negarme un AÑO entero contigo, en una HABITACIÓN, SOLO. Tienes que pensarlo bien, Zen, podrías estar con un impostor.
            
            @SoyZenn 

las propias se dedicaron a dejar caricias en el pecho del adverso, trazando formas aleatorias en este. sus ojitos se cerraron al permitirse disfrutar de los masajes que le daba. alzó la mirada nuevamente y la sonrisa en sus labios se amplió.  — eres tan lindo. amo tus hoyuelos. — susurró, se enderezó hasta dar con su rostro y juntó sus labios en un casto beso.
            
            — claro que eres irresistible, ¿sabes cuántas mujeres veo ligándote cuando salimos a veces? demasiadas para mi gusto; que bueno que solo eres para mí. — formó una pequeña mueca ante el pellizco. — todo un año, y no es “soportar” amo estar contigo así que disfrutaría muchísimo estar contigo todo el tiempo. — no pudo evitar reír ante la contagiosa risa de la maldición, besándole repetidamente.  — jamás te haría algo así, fenrir, si te golpearía pero jamás con una katana.  — soltó otra risilla y volvió a acomodarse contra su pecho firme. 

Hmmmm... ／Lo observó detenidamente por varios segundos como si estuviera analizando a profundidad tanto a sus explicaciones como a la maldición misma. Al cabo de un rato, exhaló exasusta y se encogió de hombros. 
            Parece que eres inocente después de todo, al menos por ahora. Pero te estaré vigilando, viejito. 

Y confío en esas películas porque una es protagonizada por Mel Gibson, y si el hombre pudo realizar investigación profunda para "Apocalypto", lo mismo podría haber hecho para "Señales". Yo creo en él. ☝

. . . ¡AJÁ! ／lo apunta con su dedo índice. 
            Yo jamás dije que fueran películas de cosas del espacio, ¿por qué lo asumiste? ¿Cómo lo sabrías? La única manera es que ya lo sabías porque TÚ LAS ROBASTE, te has delatado, anciano. 

ya, ya, deja de buscarle las cinco patas gato, que lo que tiene son cuatro. las cosas pasan por algo fenrir, sukuna según lo poco que sé era alguien demasiado fuerte y necesitaban enfocarse solo en ganar en contra suyo. aunque te hubieras esforzado más, yo no estaba bien en ese momento tampoco así que estoy cien por ciento seguro de que la habría cagado igual. ya la cosa está tranquila, así que tenemos mucho tiempo para disfrutar juntos, tranquilo. entonces, entrégame el mundo entero, nunca te alejes de mi lado, y de paso que nunca se acaben tus besos.  / sonrió cortito, jadeando al notar la intención de la maldición de alargar el beso, en cuanto lo tuvo contra su cuello, besó su cabecita. no pudo evitar estremecerse al sentir los brazos adversos, disfrutando de la cercanía y con sus manitas prolongando las caricias.   no quiero volver a eso, si te soy honesto. ya va más de dos meses que no peleo y ahora mismo no quiero volver. pienso en pelear y solo siento un pesar en el pecho, ya ni por gusto lo hacía. ¿sabes cuántas veces tuvieron que reemplazarme los brazos y cambiar el compresor interno? perdí la cuenta de cuántas veces me morí en el ring solo para al otro día despertar en la cama.  / mientras hablaba, sus manos se aferraron más al mayor, buscando consuelo inconscientemente.   no hace falta que hagas eso, fen. prefiero que te quedes aquí, conmigo. si lo encuentras, avísame, hay un par de cosas que quiero hacer primero. 

ambos, ambos nos fuimos por diferentes caminos, así que si quieres buscarle la culpa a alguien, es de los dos. realmente si cualquier persona lo mira de otro ángulo, tu deber de salvar al mundo era muchísimo más importante, y no es que me estoy haciendo menos, es que estoy diciendo que entiendo perfectamente por qué pasó lo que pasó. yo sé que también soy tu prioridad, pero hay cosas que no se les puede cambiar el rumbo. con muchos besos y mimos se compensa todo, querido.  / lo bajó un poco para dejar un beso sobre sus labios y al final lo abrazó, escondiendo el rostro impropio en el hueco de su cuello. una de sus manos descansando sobre su nuca y la otra acariciando sus cabellos.    no lo sé, no se que me pasaba en la mente en esos momentos. papá admiraba de manera obsesiva las peleas y le daba satisfacción de una manera muy extraña. crecí con el pensamiento de que si no le daba un buen espectáculo o salía lastimado de una manera grotesca, la pelea iba a ser un fracaso; es estúpido, lo sé. …¿eso crees? y si, era un tipo de maquinaria. donde estará escondido él verdaderamente, aún nadie sabe. pero esa cosa que conociste, no era él. 

lo viví, pero no fue tu culpa, ya te dije que no lo es. ya estamos juntos, amor mío, ¿no crees que eso es más importante que seguir mirando al pasado y pensando en todo lo que pasó? ya estamos aquí, frente al otro, eso basta. / sus manos se alzaron para tomar el rostro del mayor, acariciando sus mejillas.   mhm, salí muchas veces lastimado a propósito.  / admitió.  sentía que eso me iba a dar valor, pero los dolores de los días próximos eran insoportables. así es, lo único que recuerdo es aye un rubio rescató a la otra chica que estaba conmigo y que el cuerpo de papá era un ¿robot? no lo sé bien. 

/ buscando confort, metió ambas manos por debajo de su camisa, aferrándose ahora directamente a él y descansó ahora su cabeza completamente de su pecho, enfocado en escuchar sus latidos.   en un inicio sabía que no la detestabas, pero a la vez eso fue en el único de nuestra relación así que ya va muchísimo tiempo. me alegra saber que eso cambió y para bien. dales un gracias de mi parte también.   / descansó su rostro entre aquellas grandes manos y su mirada se alzó, sonriendo breve.   no quiero ni imaginar si te hubiera pasado algo,  así que, calladito y no menciones ese tema o me pondré a llorar como tú. en cierto punto olvidé la mayoría de las cosas que pasaron con nosotros, eso no lo voy a negar. pero pude recuperar la memoria gracias a alguien que descubrió lo que papá estaba haciendo. 

no tengo que dejarme llevar por laufey porque te conozco y sé que lo hiciste.  /  una sonrisita se posó en sus labios. ambos brazos se envolvieron alrededor de su torso y su mentón fue a para en el pecho del mayor, observándolo mientras hablaba.    yo sabía que debajo de todo ese perfil frío que tienes, te preocupabas por laufey. tan lindo que eres.  / susurró, besando su clavícula.  yo en cierto punto pensé que te iba a olvidar porque ya no era capaz de recordar bien tu rostro ni tu voz. 

mío, mío.