Ahora quieres cambiar al que posee el título de mi merodeador favorito, Potter? Bueno, te reto a que lo intentes, y estoy segura que amas un buen reto. ¿Desde cuándo? Tienes el nivel de atención de un cachorro. ¡Hey! No lo quiero lloriqueando en la sala común, me dirá mil chistes terribles para demostrarme que él es el divertido. ¿Sabes? A mi también me gustó estar contigo, me sorprendiste tanto, incluso no dejé de pensar en eso toda la noche, lamento si tengo ojeras. Bueno, eso si, Potter, detestaba como querías acercarte a mi antes, y era lamentable que un chico tan lindo como tú tuviera esa pésima arrogancia, pero cuando eres amable y humilde, te hace lucir increíble. ¿Te gritó? ¡Hubiera pagado lo que fuera por ver eso! Marlene siempre quiere meterme ideas buenas de ti a la cabeza, comienzo a creer que tu tienes que ver con eso. Está funcionando, porque sigues siendo ese chico divertido y extrovertido pero sin arrogancia, y eso es… dios, muy atractivo. ¿Mi figura? Vaya, Potter, ya estás entrenando en confianza, ¿Cierto? Admito que no me disgusta. Tú también te veías muy apuesto ayer, y la colonia que usaste me dejó sin palabras, espero no haber sido muy obvia. ¡Hey! Basta, James, no me quiero sonrojar en pleno pasillo, ¿Quieres? Podré tener una personalidad fuerte pero aún así soy algo débil ante los cumplidos, bueno, ante tus cumplidos. Cállate.