Kai.

¿Huyendo? ¿Qué dices, Weasley? No hago eso. Créeme que la Copa me tiene lo suficientemente enfocado como para concentrarme en alejarte, que no tiene sentido tampoco. Te quiero cerca, como siempre, lo sabes, ¿verdad? Pero... Por Merlín, tus lecturas no son un problema, en serio, Kai. El problema er... es que necesito estar repitiéndome las posiciones del equipo contrario para los entrenamientos del equipo entero, después de mi entrenamiento personal. Necesito oír mis pensamientos, no puedo estar oyéndote y no pretendo ignorarte. Hay horarios para utilizar el Campo, Kai, ¡tengo que desayunar rápido! O morir de sueño para levantarme más temprano que de costumbre y llegar a tiempo al Gran Comedor. Prefiero que me ruja el estómago antes de dormirme sobre la escoba y morir cayéndome al suelo, pelirroja. Sé dónde encontrarte... Espera, ¿sé dónde encontrarte? Tal vez has cambiado de sitio este tiempo y no lo sé.

Cualquiera es un ángel en comparación a Fred, encanto. Oh, ¿¡cómo que nunca has leído uno, Kai!? Por favor, no puedo permitir esto. Te prestaré los míos del superhéroe más genial que hay: Spiderman. Dime que has oído hablar sobre él, porque me sentiría completamente decepcionado de la mala educación que recibes de tus hermanos y conocidos, incluyéndome por no presentartelo antes. No, no harás la broma sobre mi cabello, pero aún así me quedaré con que me dijiste guapo. ¡Sigues con eso, mujer maligna! Apuesto a que no encontrarás otro compañero de banco como yo, ¿quién, sino, no te molestará en clases porque se encuentra profundamente dormido o perdido en estrategias mentales para los partidos? Nadie. Deberías valorarme, Kaiserin Weasley. Así que tus compañeras suspiran por mí, ¿eh? Vaya, es bueno saberlo. Lo tendré anotado, ¿qué dicen? Tal vez incluso te metan un par de ideas buenas respecto a mi persona, así me aprecias un poco más como deberías. Háblame sobre ese trabajo, ¿necesitas algo mientras lo haces? No puedo ofrecerte conocimiento, pero sí llevarte algo de las cocinas porque siempre olvidas comer mientras te concentras en tu tarea, sabelotodo. Estamos de acuerdo con ese Plan B, señorita, aunque intentemos que el Plan A funcione, ¿sí? No quiero tener que darle explicaciones a McGonagall si me atrapa.

Weasley, ¿me pides explicación científica? ¿A mí? ¡Por Godric, no lo sé! Pero lo que sí sé es que no es lo que piensas. Sé que tu deseo es ese, pero... Oh, no, no. Alto ahí, pelirroja. No leeré más libros que los aburridos e interminables textos que Binns nos manda a leer. Lo siento, cariño, pero no ocurrirá. ¿Sentarnos separados? ¡Serás extremista, mujer! No he dicho eso, por Merlín. No sabía que reaccionarías así, dejándome solo en las clases, que son más tortura que otra cosa para mí. ¿Cómo sobreviviré a las largas horas de Encantamientos sin cabecear contra el banco? Tampoco sé cómo entenderé la letra diminuta y extraña de Flitwick sin tu ayuda. Espera, ¿mi trabajo dices? ¿Yo, averiguar quién anda embobado de ti? ¡Me ofendes, Weasley! Sé que me vería guapo vestido al estilo Sherlock y fumando una pipa, pero no lo haré. Tengo tareas más importantes que tratar cuando estoy allí, como cambiarme de ropa. ¿Por qué no te escabulles tú a averiguar la identidad de tu "persona especial"? Podría dejar que te metieras y fingir demencia sobre ello, sólo si me confirmas que dejarás salir la pizca de curiosidad y valentía que viene de la mano de tus hermanos, los gemelos, y entrarás a investigar. No entiendo qué lado positivo le ves a eso, Weasley, y lo pintas como un reemplazo total de mi persona. Últimamente estás dando a entender una cosa semejante, ¿es que ya quieres otro amigo? Increíble de tu parte, pelirroja, nunca lo esperé.